“UNA EDUCADORA EXCEPCIONAL”

Al entrar a la casa de Xenia Maritza Lozano de Alvarado, quedas asombrado por las maravillas que guarda. Me saluda con una sonrisa brillante y me da la bienvenida a su fascinante historia. Esta mujer se dedicó a la educación, siendo muy apreciada tanto por sus estudiantes como por sus colegas.

Nacida el 10 de abril de 1939 en la provincia de Colón me cuenta que, aunque no obtuvo lo que quería, ella recibió lo necesario para una infancia feliz. El idioma inglés fue su lengua materna a pesar de ser panameña y se graduó de Comercio en el Saint Mary’s Academy, luego emprendió una travesía a la ciudad capital en busca de mejores oportunidades.

Su primer trabajo fue de secretaria en la Zona Libre de Colón. Aprendió a hablar el español fluido al llegar a la Universidad Nacional y, con mucho orgullo, se graduó de Licenciada en Filosofía, Letras, Educación e Inglés; sin embargo, ella aclara que la materia que impartía era el inglés.

Hablándome de su vida personal, me cuenta que se casó a los 25 años y fue bendecida con tres hijos: Xenia, Jeane y José. Sin embargo, su esposo falleció de cáncer 13 años después, cuando acabaron de mudarse a su nueva casa. Fue algo difícil para ella tener que llevar adelante a tres niños por sí misma. Sin embargo, no estuvo sola, su madre la ayudó a seguir adelante. Trabajó en el Instituto Panamericano y el Panama Canal College. Llegaba a la casa de trabajar a las 10 de la noche de lunes a viernes.

Referente a sus clases, le pregunté si era divertida o regañona y me contesta que le encantaba hacer varias dinámicas con sus estudiantes. Ellos podían cantar, actuar y hasta jugar juegos de mesa los días libres. Me cuenta que varios de sus estudiantes se entretenían en sus clases mientras aprendían la materia. Lo que más le gustaba de ser docente era enseñar y divertirse al mismo tiempo.

Además, fue una de las dos educadoras panameñas en conseguir una beca de la embajada estadounidense. Visitó lugares emblemáticos de Estados Unidos como la Casa Blanca y la Estatua de la Libertad y el Puente Golden Gate. Me cuenta que “siempre me confundieron con norteamericana porque hablaba en inglés.”

Al nacer su primer nieto, ella se jubiló luego de 26 años de enseñanza, en tiempos donde llegó la tecnología. A pesar de desconocer cómo funcionaban, unas colegas la invitaron a ser asesora del departamento de Inglés en el Panamerican School. Después de laborar ahí por cinco años, ella comenzó a disfrutar de la vida.

Viajó por el mundo, colecciona cosas de antaño, colabora en la iglesia y pinta cuadros sobre nuestro folclor. Sus hijos me cuentan que siempre que alguien necesitaba ayuda en algo decían “mi mamá lo hace”. Cooperadora, llevadera y amistosa, así se describe la señora Xenia. Para finalizar, ella cuenta que le gustaría que la recordaran como una persona alegre, algo de lo que los que la conocemos acordamos.

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Comentarios

  1. Buen trabajo! Solo sugieron unos pocos cambios:

    – Es necesario identificar a nuestra protagonista desde el inicio de la historia. Por ello, coloquemos su nombre desde el mismo inicio. Algo así: Al entrar a la casa de Xenia Maritza Lozano de Alvarado, quedas asombrado por las maravillas que guarda. O así: Al entrar a su casa, quedas asombrado por las maravillas que guarda Xenia Maritza Lozano de Alvarado.

    – Referente a sus clases, le pregunté si era divertida o regañona y me contesta que le encantaba hacer varias dinámicas con sus estudiantes. Ellos podían cantar, actuar y hasta jugar juegos de mesa los días libres. Me cuenta que varios de sus estudiantes se entretenían en sus clases mientras aprendían la materia.****************************** Tomando en cuenta que la sra. dedicó su vida a la enseñanza, me gustaría conocer más detalles de esa etapa de su vida. Por ejemplo, en cuántas escuelas enseñó o qué era lo que más le gustaba de este trabajo.

    – Al nacer su primer nieto, ella se jubiló y llegó la tecnología también.******************* Y en esta línea, en la parte de la jubilación, añadamos la cantidad de años que dedicó a la docencia. Es decir: se jubiló luego de XX años de enseñaza…

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