La cultura Hip Hop en Panamá
A Ray desde muy niño le ha encantado la cultura hip hop. Hoy tiene dieciséis años. Desde el primer momento que escuchó música rap quedó enamorado.
Él sabe que el hiphop tuvo sus orígenes en 1973, en el Bronx de Nueva York, con DJ Kool Herc, de origen jamaicano, quien creó el sonido break. Esta cultura incluye la música rap, los grafiteros, la particular vestimenta, entre otros elementos.
El género musical surge como una expresión de la cultura negra contra el racismo en Estados Unidos, factor que le llama la atención al joven Ray. Este estilo musical, que consiste en rimar a velocidad encima de una base rítmica, encierra cuatro elementos artísticos característicos: DJ, MC (maestro de ceremonias en español), break dance y grafiti.
El maestro de ceremonias es el que interpreta la música rap. Esta nace con influencias del soul, el funk y los ritmos latinos. A través de una lírica fluida, los raperos expresan en sus letras el abuso social, su inconformismo y hacen una denuncia social.
Por su parte, el break dance es la manera en la que los que los b-boys bailan el rap. A lo largo de los años esta danza social ha ido evolucionando. Los jóvenes suelen retarse de forma individual o en grupo para demostrar su destreza en los pasos de baile. Se caracteriza por mantenerse en la pista con diferentes movimientos, según lo describe el periodista Alberto López en la versión web de El País.
Dentro del hiphop, Ray se inclina más por la música y la vestimenta. Quizás le ha llamado más la atención porque representa la cultura negra, y como descendiente de afroamericano se siente identificado.
Pero en Panamá la cultura hiphop no es bien vista, ya que la asocian con lo conocido como “gueto”, que en lenguaje coloquial son barrios populares con problemas sociales, y usualmente mantienen una marcada presencia de grupos delincuenciales. Por eso, se considera como algo de jóvenes rebeldes sin ley, que dañan las paredes de los edificios. Esto refleja que la mayoría de la población no comprende la historia y orígenes de este movimiento que hoy muchos jóvenes siguen.
Pero Ray sí sabe, y practica la cultura. Comprende que lo que dice la mayoría no es cierto y trata de orientar a personas que no conocen este estilo de vida.
En Panamá la cultura hiphop llegó en la década de los 90 con la música rap, que además trajo consigo la forma de vestir, la cual consistía en ropa deportiva de marcas reconocidas. También incluía el arte de tatuarse el cuerpo, el uso de prendas de oro con sus peculiares cadenas largas con diamantes (o imitaciones de llamativas piedras brillantes). Además, gracias a los grafiteros de esta cultura, actualmente vemos muchas paredes adornadas con este arte.
Ray vive en los suburbios de la ciudad de Panamá, estudia, es un buen chico a quien solo le encanta el hiphop. Se inclina más en la mezcla de sonidos. Piensa seguir promoviendo esta cultura en Panamá, que para él es la manera de hacer saber al mundo la lucha de las comunidades negras en nuestra sociedad actual. Y sueña con ser un gran DJ.