Las Runaways

“dun dun dun dun dun…” Así comienza la canción ‘Cherry Bomb’ de ‘The Runaways’. Las rápidas y continuas notas de las guitarras fueron suficientes para llamar mi atención. La canción, aunque solo sea de dos minutos, fue suficiente para cambiarme la vida. Tenía que saber quiénes eran estos dioses que producen música tan cautivante. Bueno, al buscar en Google, me sorprendí al saber que eran diosas las que hacían la música. Y no solo eso, además me enteré, que ellas fueron la primera banda de rock compuesta por solo mujeres que alcanzaron fama internacional en los años ‘70s. 

 

Tanto me gustaron sus canciones, que hasta había intentado cantar como Cherie Currie, pero claro, mi voz ni alcanzaba la suya, con su estilo excéntrico y único. Me sorprendía cada vez más cuando escuchaba su álbum de 1975 por primera vez. El rango de su voz era tan extenso que podía igualar los llantos agudos de las guitarras de Lita Ford y Joan Jett o el sonido profundo del bajo de Jackie Fox.

 

Al momento que se terminó la canción, agarré mi guitarra y a pesar de que solo había estado tocando por unos tres meses, y no era buena, decidí aprenderla. Claro, al comienzo fue muy difícil, pero con mucha práctica, al final pude tocar el verso y el coro.  Ahora era tiempo para el desafío real: el solo. El solo de guitarra de Lita Ford que me erizaba la piel y explotaba en mis oídos. Era algo que no se me salía de la cabeza por meses. 

 

De noche y de día practicaba y practicaba, hasta que de repente, pude hacer el solo que me había acelerado el corazón meses atrás. Sentía que mi corazón seguía el ritmo fuerte y resonante que producía la batería de Sandy West. Las vibraciones de las notas viajaban por las puntas de mis dedos hasta alcanzar mi alma.  Finalmente lo había logrado.

 

A mi siempre me ha gustado la música, desde que era pequeña. Escuchaba artistas como Shakira, Jamiroquai, Guns and Roses, y además siempre veía a mi papá escuchar canciones clásicas de rock y tocar guitarra, que fue lo que me inspiró a comenzar la guitarra en primer lugar. El también fue el que me enseñó mis primeras canciones y acordes. Mi gusto en la música ha cambiado mucho desde que era pequeña. Antes escuchaba música casualmente, pero ahora, es algo como una religión. Por los años he descubierto muchos géneros que me gustan como la salsa, jazz, hip hop, disco, reggaeton y reggae, pero mis favoritos son el rock, blues y el metal. 

 

Algo que siempre me ha inspirado con la guitarra, es ver videos de bandas que me gustan, como las Runaways, tocar en vivo. Eso siempre me inspira a seguir practicando y practicando, para tratar de llegar al nivel al que ellas están. Verlas en los videos también me dio el coraje para comenzar a tocar guitarra en frente de personas, en vez de sola en mi cuarto. Antes me daba demasiada pena tocar en frente de personas, incluso mi familia, pero al ver que ellas tocan en escenarios de miles de personas, gradualmente se me quitó la vergüenza. Ahora, con casi dos años de estar tocando, espero comenzar una banda de rock con mis amigos. Aunque nunca he tenido una banda, siempre toco con mis amigos que saben cantar, tocar guitarra y tambor. 

 

A decir la verdad, antes de saber sobre ellas, a veces me sentía desilusionada. Cuando veía listas de los mejores cien guitarristas en la historia, nunca había más de tres mujeres. No sentía que tenía chance ni lugar en el mundo para ser una de las mejores guitarristas. Pero eso cambió cuando descubrí a ‘The Runaways’. 

 

Pronto después, descubrí que a muchas de mis amigas también les gustaba su música y las admiraban, especialmente a Joan Jett, la frontera de la banda y la proclamada Reina del Rock and Roll. Mi punto de vista cambió. Ya no me sentía sola. No sentía como si la música fuera una carrera  inalcanzable para mí. ‘The Runaways’, al haber superado las dificultades de ser una banda de mujeres en los ‘70s, ayudaron a inspirar generación tras generación de artistas  jóvenes, incluso hasta casi cincuenta años después. Si ellas pudieron hacerlo, yo también.

 

Nunca olvidaré el momento en que escuché la canción por primera vez, y espero algún día ser tan inspirante e icónica como ellas lo son. Espero influenciar a otras jóvenes con un sueño de ser músicas, igual como ellas me inspiraron a mí a seguir el mío. 

 

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